domingo, 6 de septiembre de 2015

Vida a bordo

La experiencia recién vivida como enfermera de crucero ha tenido momentos mágicos y momentos realmente difíciles. Eso sí, no pasa desapercibida y sin ninguna duda quedará marcado en mi vida y en mi corazón para siempre.
He tenido la bonita oportunidad de volver a sentirme enfermera de hospital, de conocer cómo es la vida abordo desde dentro, de llorar de emoción al descubrir un paisaje que de repente te rodea, de enamorarme con intensa pasión, de encontrar cada día un nuevo destino.
Toda una aventura llena de contrastes y con un final que todavía está por escribir pero que no pasa inadvertido.
Dejar que se derive de este viaje una decisión que haga cambiar el rumbo de mi vida está en mis manos.
Los motivos, los reservo por ahora.

No hay comentarios:

Publicar un comentario