lunes, 30 de septiembre de 2013

Adiós miedo Adiós

Miedo a la soledad... miedo al fracaso... miedo a sufrir... miedo a equivocarnos... miedo a no lograr lo que teníamos pensado para nuestras vidas... los hay para todos los gustos. 
Cuando no los detectamos o sencillamente no los queremos ver, pasan de ser ideas a ser síntomas, a manifestarse de todas las formas posibles habidas y por haber... Dolores, vómitos, fobias, depresión, ansiedad... y es entonces cuando se enmascara el origen del problema, y por consiguiente, su solución.
La buena noticia es que luchando por descubrirlos, se diagnostican, y si nos enfrentamos a ellos adecuadamente, desaparecerán.
Parece cosa de niños o de cobardes. Sin embargo, y como muy bien describe algo que recientemente leí, valiente no es el que no siente miedo, sino el que a pesar de sentirlo da un paso adelante. 
Guiarse en la vida por los miedos paraliza o te hace mover muy posiblemente en dirección contraria a los deseos, ya que casi siempre lo que más nos asusta es lo que más deseamos.
Mi consejo : No alimentes ese sentimiento, levántate, lucha y vencerás.


jueves, 26 de septiembre de 2013

Lecciones de vida

Septima planta del Hospital Materno Infantil. Lágrimas sinfín tras el cristal de la sala de espera. Por lo que acabo de rechazar, por lo que dejo atrás. Una prueba más en el camino.
Un instante después reflexiono sobre lo que tengo a mi alrededor y me doy cuenta de que no tengo derecho siquiera a estar así. Pacientes de oncología ginecológica fluctúan a mi alrededor. Esa gente no tiene opción de elegir su situación. Yo sí.
Y una vez más me pregunto si todo pasa por algo porque no sólo estar allí es una pequeña lección de perspectiva vital. También me hace recordar que hace 12 años fue este precisamente el lugar donde debuté como enfermera. Donde aprendí que no todo era tan fácil pero que con corazón, coraje y confianza se puede.
Hoy lo vuelvo a sentir.


miércoles, 25 de septiembre de 2013

El mundo ¿en mis manos?

Imagino que os habréis preguntado alguna vez si las cosas ocurren por algo, si es una especie de destino quien nos va guiando a través de señales, o si sencillamente se van sucediendo hechos aislados con una explicación y somos nosotros los que vamos conformando el camino de la vida. ¿Casualidad o causalidad? 
Mi creciente escepticismo me hace declinar casi siempre hacia la segunda opción. Pero hay circunstancias en la vida que realmente me hacen reflexionar sobre este hecho por la sorpresa que me provocan. 
A veces son meros detalles que no merece la pena pararse a valorar, otros, como el que se me ha planteado hace unas horas, parecen poder cambiar el rumbo de una vida. 
Quizás ni todo van a ser señales ni todo está en nuestras manos... pero de las que podemos decidir, ¿a cuáles hacer caso y a cuáles no? ¿Tenemos un destino trazado? ¿Entonces hacemos caso a eso de "Todo pasa por algo"? Supongo que es más cómodo e irresponsable dejar ciertas decisiones en manos ajenas. 
No sé si para bien o para mal, pero me cuesta creer la vía fácil. Ojalá no fuese así.


viernes, 13 de septiembre de 2013

El sentido de las cosas

Durante mucho tiempo he buscado aquello con lo que sentir pasión, con lo que dar sentido a mi día a día, y hacer que cada uno de ellos sea especial y parezca único. Durante toda mi vida, y hasta hace unos años, lo había sentido así. Todo inédito, especial y directo al éxito constante. Sin dudas ni miedos.
Ahora, a pesar de intentarlo con empeño y esfuerzo veía que muchos encontraban su inspiración y aunque yo en momentos la había sentido, no había llegado a encontrar mi lugar.
Y me doy cuenta de que, aunque no esté muy cerca de haberla encontrado, he vuelto a recordar cual era la piedra angular. u
Un fondo común que podría considerarse clave en todo proyecto de vida, ya sea personal o profesional. Algo tan sencillo y que no se aprende en los libros. Algo que solo se transmite y se siente. Mucho más importante que el beneficio. Pero que mueve el mundo y da sentido a lo que hacemos, queremos y deseamos.
Ni mas ni menos que creer en ello y ponerle ILUSIÓN.
No decaigas si la has perdido, búscala.


martes, 10 de septiembre de 2013

Come back home

Tras 7 años lejos de mi ciudad, hoy paseo por ella con calma y me detengo a ver ciertos detalles. Algunas cosas han cambiado, otras posiblemente estuvieran ahí pero pasaron desapercibidas para mí. Han peatonalizado calles, puesto fuentes nuevas, sistema de bicicletas públicas, rehabilitado edificios...
Es la misma ciudad pero distinta a la vez.  Simplemente, ha evolucionado. Situación de la cual me enorgullezco.
Y es que la ciudad está viva, en constante dinamismo. Claro reflejo de quienes la habitan.  Es la sensación de sentirme como en casa pero con mejoras y proyectos.
Trataré de hacer como la ciudad. Evolucionar y mejorar pero sin perder la esencia. 


domingo, 1 de septiembre de 2013

NECE-si-DADES (old story 2)

- ¿De verdad necesito todo esto para ser feliz?- pronuncié mientras descargaba una furgoneta llena de cosas exclusivamente mías.
Que no me considere una persona materialista no significa que no esté completamente metida en el mundo consumista que me rodea.
No tiene por que ser malo, pero tras mis últimas experiencias considero que algo sí que lo es. O al menos, sin racionalidad, como siempre.
Lo material ilusiona y desilusiona fugazmente, entretiene, requiere tiempo, esfuerzo y dedicación. Al tiempo que puede sobrecargar, distraer y obligar a hacer lo que no nos gusta por adquirir más y más.
Rafa Santandreu aborda muy bien este tema en su libro y lo denomina necesititis.
Lo fundamental es delimitar hasta donde es positivo, y a partir de cuando empieza a ser contraproducente. Y me lo he propuesto de verdad, como parte de mi último reto. Priorizar, elegir lo que realmente quiero y desechar lo demás aunque cueste trabajo.